«He recibido y aceptado una invitación de @CNN para un debate el 27 de junio. A tu
disposición, Donald. Como dijiste: en cualquier lugar, a cualquier hora», dijo Biden en un
post en X.
Trump dijo después a Kaitlan Collins, de CNN: «La respuesta es sí, aceptaré».
Este es un enfrentamiento históricamente temprano en la contienda electoral y que
marcará la pauta para los últimos meses de campaña de 2024.
Luego ambos dijeron este martes que habían aceptado también una invitación de la
cadena ABC para el 10 de septiembre. La aceptación de este debate sigue a un
intercambio de propuestas y condiciones entre las campañas de ambos candidatos.
Es probable que el debate se centre en temas cruciales como la economía, política
exterior, salud y otros asuntos nacionales importantes.
Dada la historia de debates anteriores entre Biden y Trump, se puede anticipar un
intercambio dinámico y posiblemente tenso entre los dos. El mismo se realizará sin
público y cada candidato tendrá el teléfono cerrado mientras el otro este hablando.
Las principales diferencias entre Joe Biden y Donald Trump se centran en sus políticas,
enfoques y estilos de liderazgo.
Economía y Empleo:
Trump: Durante su mandato, Trump se enfocó en revivir la economía y reducir
regulaciones. Implementó recortes de impuestos y promovió la industria manufacturera
estadounidense. Sin embargo, algunos críticos argumentan que sus políticas no
abordaron los problemas estructurales del sector y que la respuesta a la pandemia de
COVID-19 tuvo consecuencias económicas a largo plazo.
Biden: Propone un enfoque más progresista, con inversiones en infraestructura,
energía limpia y educación. Busca aumentar los impuestos a las corporaciones y a los
más ricos para financiar programas sociales y de salud.
Relaciones Internacionales:
Trump: Adoptó una postura dura hacia China, renegoció acuerdos comerciales y
abandonó el Acuerdo Transpacífico. También se retiró del acuerdo nuclear con Irán y
reforzó las relaciones con Israel.
Biden: Busca una mayor cooperación internacional y un enfoque multilateral. Quiere
volver al acuerdo nuclear con Irán y fortalecer alianzas tradicionales con países
europeos y otros socios.
Inmigración:
Trump: Abogó por políticas de inmigración más restrictivas, construyendo un muro en la
frontera con México y limitando la inmigración legal.
Biden: Propone una reforma migratoria integral, incluyendo un camino hacia la
ciudadanía para los inmigrantes indocumentados y una mayor protección para los
beneficiarios del programa DACA.
Cambio Climático:
Trump: Retiró a Estados Unidos del Acuerdo de París sobre cambio climático y
promovió la explotación de combustibles fósiles.
Biden: Quiere reincorporar a Estados Unidos al Acuerdo de París y adoptar políticas
para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Estilo de Liderazgo:
Trump: Es conocido por su estilo directo, polémico y a menudo impredecible. Utiliza las
redes sociales para comunicarse con el público.
Biden: Adopta un tono más calmado y tradicional. Ha enfatizado la unidad y la
necesidad de sanar las divisiones en el país.
En resumen, las elecciones entre Biden y Trump representan dos visiones muy
diferentes para Estados Unidos en áreas como economía, relaciones internacionales,
inmigración, medio ambiente y estilo de liderazgo
En el condado de Miami-Dade, un lugar históricamente demócrata en Florida, los
votantes indecisos tienen opiniones diversas sobre Joe Biden y Donald Trump1. Aquí
algunas de las perspectivas:
Kelly Thomas: Anteriormente registrada como demócrata, ahora se considera “sin
afiliación partidista”. Tiene valores progresistas y conservadores. Aunque no está
entusiasmada con ninguno de los dos candidatos, siente la responsabilidad de votar.
Isabela Rodriguez: Hija de exiliados cubanos, solía ser demócrata, pero se convirtió en
republicana en las elecciones de 2020. Dice: «Yo no dejé el Partido Demócrata, el
Partido Demócrata me dejó a mí».
En general, los votantes indecisos en Miami-Dade se centran en temas como la
economía y la inmigración al evaluar a los candidatos. Aunque no están
entusiasmados, reconocen su deber de votar en las elecciones de 2024.
Además, a nivel nacional, la mayoría de los votantes registrados tienen opiniones
desfavorables tanto de Biden como de Trump. Esto significa que, a menos que ocurra
un cambio significativo, las elecciones podrían ser decididas por aquellos que ven
negativamente a ambos candidatos. La apatía hacia los principales candidatos también
ha llevado a un interés históricamente bajo en las elecciones. Sin embargo, la campaña
presidencial sigue siendo incierta y podría ser la más cara en la historia de Estados
Unidos
