En mis 13 años que llevo con mi centro de adultos mayores Senior Center Adult Day Care he tenido oportunidad de ver muy de cerca muchos amores maduros, son muchos más de los que nos imaginamos los que encuentran en una pareja el remedio a la soledad. Y no se trata sólo de la idea platónica de un/a compañero/a que sólo nos lleva de la mano, sino que los amores mayores son intensos y se disfrutan a plenitud.
Tanto de parte de las personas mayores como de sus familias y amigos pueden existir ciertos sentimientos encontrados frente a estos enamoramientos debido a los mitos relacionados con la vejez. Como si el hecho de ser grandes implicara no necesitar amor o ni siquiera conservar la capacidad de amar. Y esto es todo lo contrario.
No voy a decir que es lo mismo enamorarse a los veinte que a los más de setenta, pero en un sentido más positivo que negativo debido a que a esas edades se supone que ya sabemos lo que queremos.
Y les puedo resumir de la siguiente manera lo que pienso sobre el amor en la tercera edad La compañía es clave para la salud mental y física, buscan diversión, el sentido de la pareja es la pareja en sí misma,
pasarla bien. No hay familia, ni casas, tampoco autos, ni hijos solo ellos.
Lo importante es la socialización, poder conectarse con alguien de manera íntima, les gusta mantener su
independencia, normalmente tienden a vivir cada uno en su casa y elegir cuándo estar con el otro.
Cuenta mucho el presente, el plan siempre es el A, no hay plan B porque hay una toma conciencia de que el tiempo es acotado. El aquí y ahora es tal cual como se vive el amor a esta edad.
Es muy importante para la salud, he visto como muchos de ellos cuando disfrutan de esos vínculos sociales tienen menos riesgo de deterioro cognitivo y muchas investigaciones afirman que quienes viven felizmente en pareja, en una relación sana, viven más tiempo que si estuvieran solos.
El amor no tiene edad y es un sentimiento que puede ser experimentado en cualquier etapa de la vida. En la tercera edad, el amor puede ser más tranquilo, sereno y reflexivo, que surge de la amistad y afinidad con alguien con quien se comparten circunstancias, intereses e inquietudes.
Aunque el amor romántico en la tercera edad no es el típico amor fogoso y pasional propio de la juventud, es igualmente importante y puede ser muy gratificante, aquí les comparto manos entrelazadas de varias de las parejas que tengo en mi centro y me llena de regocijo saber que esas horas diarias que están juntos significan más años de vidas para ellos.
Feliz días de los enamorados y que vivan los amores sin importar la edad!!!