En el mes de la herencia hispana Ford Motor Company realiza nominaciones a Mujeres Legendarias, mujeres que tienen un impacto en comunidades de gran presencia hispana en Estados Unidos. El premio honra a las latinas de todo Estados Unidos que están impulsando el progreso de la comunidad e inspirando un cambio positivo.
En el 2024 en la ciudad de Miami le correspondió el honor a la Doctora Ana M. Viamonte Ros una destacada médica y defensora de la salud pública, hizo historia como la primera cirujana general del estado de Florida y la primera mujer y cubanoamericana en ocupar el cargo de jefa del Departamento de Salud de Florida de 2007 a 2011.
Durante su mandato, supervisó uno de los sistemas de salud públicos más completos y complejos de los EE.UU., y logró avances significativos en la concienciación y acción sobre los problemas de salud de las mujeres.
En FIU, se desempeñó como decana asociada de Mujeres en Medicina y Ciencia, abogando por el reclutamiento de profesoras y estudiantes de medicina.
Actualmente, la doctora Viamonte Ros es profesora en la Facultad de Medicina Herbert Wertheim de la Universidad Internacional de Florida (FIU) y fue directora Médica de Servicios de Cuidados Paliativos y Bioética en Baptist Health South Florida También fue nombrada la primera directora de Bienestar de Baptist Health, donde lidera iniciativas para mejorar el bienestar mental y general de los médicos y el personal y es conocida por su dedicación a la comunidad a través del voluntariado en el cuidado de la salud.
Hoy queremos acercarla a nuestros lectores con esta entrevista.
¿Qué la motivó a seguir una carrera en la medicina y la salud pública?
La parte medica viene de familia, mi hermano que es cirujano y yo, somos la quinta generación de médicos en la familia y por supuesto siempre estábamos rodeados de conversaciones en torno a la medicina.
Referente mi inclinación a la salud pública es que vi una oportunidad de poder colaborar en los problemas que afectan a una comunidad, al estudiar medicina me sentía capaz de poder hacer énfasis en la prevención que para mí es un punto neurálgico en cualquier sociedad.
Insisto mucho en este tema con mis alumnos desde sus primeros años en la carrera profesional, salud pública es prevención. Actualmente doy una clase y le digo a los estudiantes que se fijen que ese tópico está presente desde que nos despertamos, la calidad del agua con que nos lavamos, los cereales que desayunamos , el uso del cinturón de seguridad, de los cascos, el respetar las señales de tránsito, las condiciones de los trabajadores , el aire que se respire que sea saludable, la seguridad laboral, la higiene en los colegios, la prohibición de fumar en ambientes públicos, en fin es un conjunto de acciones que hacen que esa comunidad sea saludable.
¿Cómo ha influido su experiencia como la primera mujer y cubana americana en liderar el Departamento de Salud de Florida en su carrera actual?
Soy muy orgullosa de mi descendencia hispana, mis padres vinieron de Cuba, yo fui la primera generación de mi familia que nací aquí y crecí rodeada de un ambiente multicultural y aunque nos sentimos bendecidos por todas las oportunidades que recibió la familia en este país no olvidamos nuestro pasado, mis abuelos y mis padres se preocuparon que habláramos español y yo hice lo mismo con mis hijos y ahora con mis nietos.
Esto me permitió entender ambos mundos desde el punto de vista de los pacientes ya que los latinos vienen quizás de países donde desconfían del sistema de salud y creen más en remedios caseros, en rezar, en oír consejos de familiares y amigos y siempre mi labor ha sido relacionar ambos mundos y convencer a todos de la importancia de la prevención , de cuidarse, de tener hábitos saludables y de asistir a los chequeos de rutina.
Es importante que el médico le dé la oportunidad al paciente de entender la conversación.
En este país hay una máxima muy común que es The Golden Law “, tratar a los demás como uno quiere que lo traten a uno y a mí me gustaría que existiera The Platinum Law ”, que sería tratar a los demás como ellos quieren que los traten. Eso ayudaría mucho a tener una comunidad multicultural como es el sur de la Florida más saludable.
¿Puede compartir algún desafío que ha enfrentado en su trayectoria?
En mis cuatro años de secretaria de salud y cirujana me di cuenta de que la política interviene mucho en lo que se hace y a mí me parece que con referencia a la salud nada debe ser politizado y que no sea una consecuencia partidista lo que intervenga muchas veces en las decisiones y determine a veces lo que se puede hablar referente ciertos temas públicamente y que no solo se trata de tener un seguro médico sino el acceso a cuidados médicos básicos.
¿Qué cambios ha visto en la atención médica y la salud pública durante su carrera, y cuáles cree que serán los próximos desafíos?
Es evidente que hemos avanzado en educación referente los cuidados de salud, pero aún queda mucho camino por recorrer y la etapa del coronavirus nos dio la
razón.
Como seres humanos reaccionamos solo cuando hay una emergencia, pero no veo proyección para prevención, hay que poner dinero en las cosas que son necesarias y no estamos ahí todavía.
¿Cómo equilibra su trabajo en la salud pública con su rol en la educación médica y el bienestar de los profesionales de la salud?
Siempre he estado involucrada en ese tema, mis abuelos y mis padres hacían voluntariado y desde niña iba con ellos y hoy en día hago lo mismo con mis nietos.
Ayudar a los demás cuando tienes la bendición de tener el conocimiento para hacerlo es muy gratificante.
Soy secretaria de una organización que apoya la salud mental de los profesionales de la salud, ellos también son seres humanos que pueden por diversas razones caer en adiciones y comportamientos erráticos y necesitan apoyo y ayuda.
Es importante quitar el estigma a la salud mental, los médicos y las enfermeras están permanente expuestos a muchos stress en función de los pacientes que tienen y se debe hablar y pedir ayuda, muchos no hablan por temor a que los deshabiliten o los pongan de baja y hay que insistir en poder conversar abiertamente estos temas y enfrentarlos y pedir acceso y ayuda a varios programas y herramientas que están disponibles.
¿Qué consejo les daría a las mujeres jóvenes que desean seguir una carrera en la medicina y la salud pública?
Para mí ha sido como mujer un orgullo si tuviera que volver a elegir lo haría nuevamente me encanta combinar la ciencia y el trabajo social y les aconsejo que si se dedican a esto lo hagan con pasión y con el lema de ayudar al prójimo en primer lugar.
¿Cómo ve el futuro de la salud pública en Florida y en los Estados Unidos en general?
Me encantaría decir que bien pero realmente falta mucho por hacer, si viene otra pandemia aun no estamos preparados y volveríamos a reaccionar porque no hemos trabajado lo suficiente en la prevención, tenemos que trabajar en esa línea.
¿Qué papel cree que la tecnología incluyendo la tan nombrada Inteligencia artificial jugará en el futuro de la atención médica y la salud pública? Aunque hay detractores de este tema yo sí considero que ayudará mucho a la humanidad y jugará un papel importante en la salud pública.
La cantidad de datos que se manejan y las estadísticas que se obtienen puede ayudar a manejar los récords de una comunidad entera y así poder precisar mejor los servicios de salud pública que esa comunidad necesita.
Mas allá de la doctora, ¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre a la mujer, a Ana Viamonte?
Mi familia, tengo 6 nietos, el mayor tiene 8 años y de ahí siguen los demás , disfruto compartir con mis hijos y ver los maravillosos padres que se han convertido y le voy a confesar algo siempre me ha gustado la magia y me encanta hacer trucos de magia con ellos.