En el mundo del cine, pocos roles son tan demandantes como el de un líder espiritual, y el actor mexicano Carlos Diehz asumió este reto con maestría en la película Conclave (2023), donde interpretó al cardenal electo electo-papa.
La película recibió comentarios muy positivos de los críticos, con elogios por las actuaciones, la dirección, el guion y la cinematografía, y recaudó 119,6 millones de dólares en todo el mundo.
Diehz nació en la Ciudad de México y pasó gran parte de su juventud cultivando su interés en las artes, incluyendo el dibujo, la pintura y el canto. Aunque de joven mostró interés en la actuación, su timidez lo hizo dudar en seguir ese camino. Durante más de 30 años trabajó como arquitecto, en 2009 se mudó a Canadá y se estableció en Vancouver.
En 2020, tras ver crecer y mudarse a sus hijos, Diehz decidió retomar su pasión por la actuación, siguiendo un camino más serio tras recibir talleres y cursos intensivos de actuación.
Conclave película dirigida por Edward Berger y basada en la novela homónima de Robert Harris se volvió su gran oportunidad, ofreciendo un fascinante retrato del proceso de elección papal, mezclando intriga política, fe y moralidad.
Entre los mayores aciertos de la película está la elección final de un papa inesperado y también deja un poderoso mensaje sobre la humildad, la inclusión y el verdadero propósito del liderazgo espiritual.
El actor mexicano interpreta a Vincent Benítez, un cardenal y arzobispo de Kabul (Afganistán) quien en la sexta votación toma la palabra para invocar su experiencia pastoral en lugares difíciles, alejados del remanso de paz de Europa y afirma que la violencia no puede ser la solución a la violencia. Conmovidos por el último discurso, finalmente los cardenales acaban eligiendo en la séptima votación a Benítez, quien adopta el nombre papal de Inocencio XIV.
En los últimos minutos de la película, Benítez confiesa al cardenal Lawrence que es intersexual , una condición conocida y aceptada por el anterior papa. Lawrence decide proteger este secreto y encuentra una renovada fe en la
Iglesia.
Carlos Diehz, no solo captura la esencia de un hombre de fe, sino que también humaniza a un líder religioso en un mundo donde la Iglesia a menudo parece desconectada de los problemas reales. Su actuación refuerza el mensaje central de la película: que la verdadera grandeza reside en la sencillez y el servicio.
Su elección sugiere que los líderes más efectivos son aquellos que no ambicionan el cargo, sino que lo asumen aquellos que no ambicionan el cargo, sino que lo asumen por sentido del deber y ponen la humildad como virtud por sentido del deber y ponen la humildad como virtud suprema. suprema.
Conclave no es solo un thriller eclesiástico; es una meditación sobre qué tipo de liderazgo necesita la Iglesia en meditación sobre qué tipo de liderazgo necesita la Iglesia en el siglo XXI. ¿Deben los líderes religiosos ser estrategas o el siglo XXI. ¿Deben los líderes religiosos ser estrategas o santos? ¿Puede una institución milenaria reinventarse sin santos? ¿Puede una institución milenaria reinventarse sin perder su esencia? perder su esencia?
La película no da margen a respuestas fáciles, pero deja claro que, en un mundo de ambición y divisiones, hay lugar claro que, en un mundo de ambición y divisiones, hay lugar para líderes que prioricen la compasión sobre el poder. Un para líderes que prioricen la compasión sobre el poder. Un mensaje tan relevante para la Iglesia como para la sociedad mensaje tan relevante para la Iglesia como para la sociedad actual. actual.
NOTA: Las personas intersexuales o intersex son individuos que nacen con características sexuales, incluidos individuos que nacen con características sexuales, incluidos patrones cromosómicos, gonadales o genitales que no se patrones cromosómicos, gonadales o genitales que no se ajustan a las nociones binarias típicas de cuerpos ajustan a las nociones binarias típicas de cuerpos masculinos o femeninosmasculinos o femeninos..