La Navidad es una celebración global que reúne a las familias y amigos en un espíritu
de alegría y generosidad. Sin embargo, algunas tradiciones navideñas pueden parecer
bastante extrañas o absurdas para aquellos que no están familiarizados con ellas. Hoy
te compartimos algunas y tu decides si las adoptas.
En la región de Cataluña, en España, una figura inusual aparece en los pesebres
navideños: el Caganer. Esta figurita representa a una persona haciendo sus
necesidades fisiológicas y se esconde en algún lugar del pesebre para que los niños la
busquen. La tradición data del siglo XVIII y se dice que simboliza la fertilidad de la
tierra.
Mientras que muchos países celebran a Santa Claus, Austria tiene una figura oscura
llamada Krampus, un demonio que castiga a los niños traviesos. Durante la primera
semana de diciembre, hombres vestidos como Krampus deambulan por las calles
asustando a los niños y adultos por igual. Esta tradición busca recordar a los niños que
deben comportarse bien.
Las Posadas, celebradas del 16 al 24 de diciembre, representan el peregrinaje de
María y José buscando posada en Belén. Las familias recrean esta búsqueda con
procesiones, cantos y, al final, celebraciones con piñatas y comida tradicional.
En Puerto Rico se hacen las parrandas, similar a los villancicos, grupos de personas
van de casa en casa cantando y tocando instrumentos, despertando a los vecinos para
que se unan a la fiesta.
En Oaxaca, también México, se celebra una curiosa festividad llamada La Noche de los
Rábanos el 23 de diciembre. En este evento, los artesanos tallan rábanos en figuras
elaboradas, desde escenas de la natividad hasta personajes populares. Este concurso
de esculturas de rábanos es una tradición que atrae a locales y turistas por igual.
En Italia, una bruja buena llamada La Befana visita a los niños la noche del 5 de enero,
llevando dulces y regalos a los que se han portado bien, y carbón a los que no. La
Befana vuela en una escoba y se asemeja a una bruja, pero a diferencia de las figuras
malignas, ella trae alegría y recompensas a los niños italianos.
En Caracas, Venezuela es tradición que los niños patinen en las calles la mañana del
24 de diciembre antes de la Misa de Gallo.
En Gävle, Suecia, se erige una enorme cabra de paja llamada Gävlebocken cada
diciembre. Esta tradición se remonta a tiempos antiguos y representa el espíritu
navideño. Sin embargo, uno de los aspectos más extraños de esta tradición es que
cada año, alguien intenta quemar la cabra, lo cual es ilegal y, sin embargo, se ha
convertido en parte de la tradición.
En Ucrania, los árboles de Navidad son decorados con telarañas artificiales. La
tradición proviene de una leyenda sobre una viuda pobre que no podía permitirse
decorar su árbol de Navidad. Según la historia, unas arañas tejieron telarañas
alrededor del árbol, que se convirtieron en hilos de oro y plata al amanecer, trayendo
prosperidad a la familia.
El KFC en Japón, una de las tradiciones navideñas más sorprendentes es en Japón,
donde es costumbre celebrar la Navidad comiendo KFC (Kentucky Fried Chicken). Esta
tradición comenzó en los años 70 debido a una exitosa campaña publicitaria y ha
perdurado desde entonces. Las familias japonesas reservan con semanas de
anticipación para asegurarse su festín navideño de pollo frito.
En Colombia el 7 de diciembre, las familias encienden velas y faroles en honor a la
Virgen María, iluminando las calles y creando una atmósfera mágica e igualmente
celebran novena de aguinaldos 16 al 24 de diciembre, las familias se reúnen para rezar
y cantar villancicos, seguido de una cena festiva.
En Argentina y Uruguay se lanzan globos de papel iluminados, creando un espectáculo
de luces en el cielo nocturno.
Perú se hace el Santurantikuy en Cusco, el 24 de diciembre se celebra un mercado
tradicional donde se venden figuras de nacimiento y artesanías.
En Chile está el Viejo Pascuero, equivalente a Santa Claus, quien llega a los hogares
chilenos para dejar regalos a los niños.
Estas tradiciones demuestran la diversidad y creatividad con la que diferentes culturas
celebran la Navidad. Aunque algunas pueden parecer extrañas o absurdas, todas ellas
contribuyen a la riqueza de la temporada festiva en el mundo