El expresidente y presidente electo Donald Trump asumirá el cargo para un segundo
mandato el 20 de enero, el día en que la Constitución establece la inauguración
presidencial. Después de hacer su juramento, Trump se mudará de nuevo a la Casa
Blanca y para ese momento ya debe tener establecido el gabinete que lo acompañará
en sus próximos cuatro años de gobierno
La composición del gabinete del presidente Trump puede tener una influencia
significativa en varias áreas clave de la política y la administración del país, es por eso
por lo que el tema lleva semanas en los titulares de los medios de comunicación
Con figuras como Marco Rubio como secretario de Estado, es probable que veamos
una política exterior más dura, especialmente hacia países como China, Cuba e Irán.
Rubio es conocido por sus posiciones firmes en estos temas y su enfoque en la
seguridad nacional.
El gabinete de Trump incluye a personas con fuertes antecedentes en negocios y
finanzas, lo que podría llevar a políticas económicas que favorezcan la desregulación y
los recortes de impuestos. Esto podría estimular el crecimiento económico, pero
también podría aumentar la desigualdad si no se implementan medidas de apoyo
adecuadas.
Uno de los rubros más controvertidos y preocupantes es la inmigración. Trump ha
prometido tomar medidas enérgicas contra la inmigración ilegal. Con figuras como Tom
Homan, exdirector de ICE, llamado “zar de la frontera” en su equipo, es probable que
veamos políticas más estrictas en la frontera y un aumento en las deportaciones.
El enfoque de Trump en la desregulación también se extiende al medio ambiente. Es
probable que su administración busque revertir muchas de las políticas de cambio
climático implementadas en administraciones anteriores, lo que podría tener un impacto
significativo en los esfuerzos para combatir el calentamiento global.
La nominación de figuras controvertidas como Matt Gaetz para el puesto de fiscal
general, aunque retirada, muestra la disposición de Trump a elegir personas leales a su
visión, incluso si tienen antecedentes problemáticos. Esto podría influir en la forma en
que se manejan los casos legales y las investigaciones durante su mandato.
Con un número considerable de nominados con acusaciones de conducta sexual
inapropiada y miembros que representan una amenaza a la seguridad del país, el
republicano ha dejado en claro que su lealtad personal está por encima de los
estándares éticos que alguna vez distinguieron a una de las mayores democracias del
mundo. Aunque ningún candidato ha sido formalmente acusado de delitos, sus
respectivos historiales representan una gran preocupación para la dirección que podría
tomar el segundo mandato de Donald Trump.
Kathleen Dolan, profesora de Ciencias Políticas de la Universidad de Wisconsin,
explica para The Washington Post que, con estas decisiones, Trump parece estar
decidido a desafiar las normas aceptadas en la política, y sociedad en general, pues
sus nominaciones marcan un antes y un después en la percepción pública de la justicia
y los líderes del país. “Nunca ha habido nada como esto”, expresó.
La composición del gabinete de Trump refleja su enfoque en la lealtad y la experiencia
en áreas clave de su agenda política. Esto podría llevar a una administración más
cohesiva en términos de implementación de políticas, pero también podría generar
controversias y desafíos legales debido a las elecciones de personal.